El arte de la destrucción

En el mundo en constante evolución del entretenimiento interactivo, donde nacen universos digitales, existe un grupo olvidado que se dedica a la artesanía y que es conocido como Artistas de la destrucción. Estos arquitectos virtuales son los cerebros detrás del increíble caos y los cataclismos que añaden profundidad e inmersión a nuestras experiencias de juego favoritas. Este papel es fundamental para crear unos juegos fantásticos, ya que aumenta la inmersión, proporciona realismo visual, modela las mecánicas de juego, contribuye a la narrativa ambiental, ofrece autonomía a quienes juegan, y añade estrategia y desafíos. Su experiencia técnica y sus esfuerzos de colaboración ayudan a que los mundos de los videojuegos cobren vida y proporcionen experiencias de juego memorables.

Para comprender mejor su vida, nos hemos sentado con algunos artistas de la destrucción de nuestro equipo para que nos hablaran de su trayectoria y arrojaran luz sobre el espíritu artístico que alimenta su oficio.

Avinash Masih relata su viaje al mundo de la destrucción artística. "Comencé mi viaje como artista técnico júnior en una empresa de subcontratación de arte. Fui un artista técnico del grupo de cinco que apoyó a más de 300 artistas. Lancé mi primer título a los seis meses de unirme al equipo. Era un gran proyecto y el puesto de artes técnicas me resultaba nuevo y abrumador. Quería aprender más sobre el puesto y adquirir soltura con el software 3D estándar del sector, así que decidí estudiar un máster centrado en ese aspecto en particular". La determinación y la pasión de Avinash le llevaron al programa de Artes e Ingeniería del Entretenimiento de la Universidad de Utah, una combinación de estilo de trabajo del sector y responsabilidad personal. Durante el curso, descubrió su inclinación por crear contenido dinámico en juegos, lo que con el tiempo le allanó el camino para convertirse en un artista de la destrucción.

Sean Mulqueen, por otro lado, tomó un camino diferente, el de pasar del cine a los videojuegos. "Después de no encontrar mi pasión a través del dibujo en la universidad, terminé trabajando con mi hermano para hacer un portfolio que me permitiera estudiar arte 3D en la Gnomon School of VFX", explica Sean. Hizo uso de los conocimientos adquiridos en Gnomon para lanzarse de cabeza a la industria del videojuego.

La travesía de Sean lo llevó a trabajar en importantes proyectos cinematográficos antes de que se encontrara creando experiencias interactivas. Con el tiempo, una amistad le puso en contacto con Respawn Entertainment, donde comenzó su viaje como artista de dinámicas y, con el tiempo, acabo ascendiendo hasta convertirse en jefe de destrucción.

El papel de artista de la destrucción es relativamente nuevo y requiere una mezcla única de habilidades artísticas y técnicas. Según My Wu, artista de la destrucción veterano, el entusiasmo y el afán de aprender son lo más importante. "Hay mucho que hacer en este departamento, desde preparar elementos del entorno para que estén listos para ser destruidos, animar elementos, trabajar y comunicarte con varios departamentos hasta gestionar tu tiempo en función de las necesidades y lo que se pueda conseguir".

Yves Fouda, otro experto en este campo, pone énfasis en la importancia de perseverar y acumular experiencia. "Lo que más nos falta es experiencia. Es muy difícil encontrar a alguien de nivel medio a sénior", dice Yves. Señala que, aunque muchas personas tienen experiencia en el mundo del cine, el sector de los videojuegos tiene una serie de exigencias únicas. Sin embargo, Yves valora más el elemento humano a la hora de contratar, es decir, buscar gente con potencial para aprender y crecer.

La carrera de destrucción artística es el compromiso de dar forma a las narrativas visuales de nuestros videojuegos favoritos. Como han demostrado Avinash, Sean, My e Yves, el camino para convertirse en artista de la destrucción puede ser único y estar repleto de giros inesperados. Y para quienes aspiran a ser Artistas de la Destrucción, la industria está continuamente en busca de nuevos talentos. El mundo de los videojuegos evoluciona a un ritmo vertiginoso, por lo que siempre se necesitan mentes creativas que rompan barreras e insuflen vida (y destrucción) a los mundos virtuales. En un momento en que EA y sus estudios continúan explorando el potencial de este grupo de Artistas de la destrucción, hay muchas oportunidades para embarcarse en este emocionante viaje.

En palabras de Masih, "siempre me interesaron los juegos en mi juventud y solía jugar a todos los que podía adquirir... Disfrutaba tanto del viaje que quise crear algo maravilloso y compartirlo con el mundo". Es la pasión por los juegos y el deseo de crear experiencias extraordinarias las que impulsan a Artistas de la destrucción a superar los límites de lo que es posible en el universo de los videojuegos.

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